Por ahora la mayor parte del dinero que envían los venezolanos desde el exterior permanece fuera del sistema financiero y no ingresa al mercado cambiario. Bancos como el Mercantil crean alternativas.
Víctor Salmerón
Imagen Pixabay
La banca venezolana comienza a crear canales que permitirán que los dólares provenientes de las remesas ingresen a la economía formal y ayuden a incrementar la oferta de divisas en el mercado cambiario.
A Banesco, que firmó una alianza con MoneyGram, se suma el Banco Mercantil con un esquema en el que cualquier persona en el exterior con una tarjeta internacional de débito o crédito de Visa, MasterCard, Dinners Club y Discover podrá enviar dinero a algunos de los 3,5 millones de clientes del Mercantil.
Quien envía el dinero desde el exterior debe registrarse en el portal de pagos del Banco Mercantil, afiliar su tarjeta y transferir el dinero con una comisión de 4%. El cliente del Mercantil en Venezuela recibe bolívares al tipo de cambio oficial y cada transferencia tiene un monto mínimo de diez dólares y máximo de 300 dólares.
No hay datos precisos sobre el monto de dinero que envían los venezolanos en el exterior. El informe del Banco Interamericano de Desarrollo Las remesas a Latinoamérica y el Caribe en 2023 menciona el estimado de la consultora Ecoanalítica, que indica que en 2023 las remesas estarán en torno a 2 mil 500 millones de dólares.
El informe explica que en el caso de Venezuela es difícil precisar el incremento de las remesas “debido a la incertidumbre sobre el valor total” y opta por excluir al país de este análisis que incluye al resto de la región.
Un estudio de la consultora Anova indica que 25% del total de las familias venezolanas dice que recibe remesas por un monto promedio de 150 dólares mensuales.
Las tarjetas
Por ahora una porción muy importante de los dólares que se envían a manera de remesas permanece fuera del sistema bancario. En uno de los esquemas más utilizado, los venezolanos en el exterior transfieren a la cuenta en el extranjero de otra persona que está en Venezuela. Luego, quien recibe las divisas, deposita bolívares a quien espera la remesa.
Nelson Acosta, presidente del Banco Mercantil, explica que “por la historia de control de cambio las remesas a Venezuela vienen de distintas formas, no están institucionalizadas como en otros países que ingresan por compañías como Western Union o un banco”.
“Entran de muchas formas, familiares, panaderos que hacen de casas de cambio y eso atomiza. La idea que tenemos es facilitar la vida de clientes y venezolanos que lo hacen con costos escondidos, preocupaciones, fraudes y tiempos de espera. Esto es inmediato y con costos conocidos”, dice Nelson Acosta.
Lo que ingresa
Nelson Acosta indica que principalmente los dólares que en este momento están ingresando a la banca provienen de quienes dentro de Venezuela utilizan tarjetas de débito o crédito internacionales.
“Cuando una persona utiliza una tarjeta internacional en un punto de venta venezolano, al banco correspondiente ingresan los dólares y el banco hace el pago en bolívares al comercio”, dice Nelson Acosta.
Añade que el monto anual por este tipo de operaciones se ubica entre 900 y mil millones de dólares y que la banca, por las regulaciones vigentes, está obligada a vender estos dólares en el mercado cambiario.
Los dólares que recibirá el Banco Mercantil por quienes envíen dinero desde el exterior a través del nuevo canal en su portal de pagos recibirán el mismo tratamiento que los dólares por pagos con tarjetas internacionales en el país: serán ofertados en el mercado cambiario.
Si los bancos logran atraer montos importantes, los dólares que recibirán serán vendidos en el mercado cambiario y ayudarán a incrementar la oferta de divisas y a estabilizar el tipo de cambio.
La región
Cuando la oferta de dólares aumenta gracias a las remesas la economía se beneficia de una fuente de ingresos que incluso en naciones de Centroamérica ha llegado a superar el monto de las exportaciones.
Las remesas pasan a formar parte de los recursos con que cuenta un país para realizar importaciones, estabilizar el tipo de cambio o incrementar sus reservas internacionales sin necesidad de endeudarse.
De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo este año los países de América Latina y el Caribe recibirán a través de las remesas 155 mil millones de dólares, una cifra que se traduciría en un aumento de 9,5% respecto a 2022.
El aumento se explica principalmente por el crecimiento de las remesas a los países de Centroamérica (13,2%), el crecimiento de las remesas que recibió México (9,8%) y el crecimiento de las remesas que recibió América del Sur (7,9%).
“El monto recibido durante el año refleja el incremento del ingreso de los migrantes, quienes mejoraron sus tasas de empleo, así como el avance del proceso migratorio de los periodos previos” afirma el Banco Interamericano de Desarrollo.
Gerentesisve@gmail.com
X: @gerentesis
X: @vsalmeron