De acuerdo a la información entregada por el gobierno a la OPEP la producción promedio del segundo trimestre de este año registra un alza de 16% respecto al último trimestre de 2022. Se necesitan reformas para un aumento sostenido.
Víctor Salmerón
Foto de Terry MacGraw / Pixabay
Tras un largo estancamiento la producción del petróleo, un área clave porque provee la mayoría de las divisas que ingresan a la caja del gobierno, comenzó a crecer. La información entregada por el gobierno a la OPEP indica que en el segundo trimestre de este año la producción promedio se ubicó en 808 mil barriles diarios, lo que implica un aumento de 16% respecto al último trimestre de 2022.
Buena parte del aumento obedece a la mayor producción de Chevron, la empresa estadounidense que recibió una licencia de Washington para incrementar sus operaciones en Venezuela.
Al momento de obtener la licencia Chevron estaba produciendo 55 mil barriles diarios pero solo necesitaba reanudar sus operaciones en el campo Boscán para aumentarla rápidamente.
“Las informaciones señalan que Chevron ya llegó a 130 mil barriles en junio, por lo que es muy factible que logre la meta de 150 mil barriles en diciembre. Incluso podría llegar a 175 mil barriles si disminuyen las fallas de infraestructura y se logra el dragado del Lago de Maracaibo en Bajo Grande”, dice la consultora Síntesis Financiera.
Un mayor aumento luce complicado. La licencia a Chevron no le permite perforar nuevos pozos y la posibilidad de un cambio en esta restricción depende de si Estados Unidos aumenta o no la flexibilización de las sanciones.
Expertos como Francisco Monaldi, director del Programa de Energía para América Latina del Instituto Baker de la Universidad Rice, han alertado que “para alcanzar los 200 mil barriles Chevron necesitará otra licencia que depende de las conversaciones políticas”.
Capacidad ociosa
Tras el colapso provocado por la pandemia y el impacto inicial de las sanciones la producción petrolera se desplomó, pero buena parte de la caída se debió al cierre de operaciones. El país conservó una capacidad ociosa que de acuerdo al Departamento de Energía de Estados Unidos, le permitía añadir medio millón de barriles diarios en poco tiempo.
Paulatinamente esto comenzó a suceder y la producción total de la industria petrolera empezó a repuntar desde el año pasado pero la capacidad ociosa está prácticamente agotada y los datos de Baker Huges indican que sólo hay dos taladros activos.
Por lo pronto, salvo un cambio importante, la meta del gobierno de alcanzar un millón de barriles diarios este año luce muy comprometida. Bancos de inversión estiman que el techo de la producción, sin cambios en la licencia otorgada a Chevron, se ubica entre 850 mil y 900 mil barriles diarios.
El precio
El 18 de julio el barril de crudo Brent, la principal referencia en el mercado, se cotizó en 79,47 dólares, una magnitud que se traduce en un descenso de 21% respecto a la misma fecha de 2022.
Si bien analistas esperaban un rebote importante en los precios, por ahora los recortes de producción de la OPEP no han tenido mayor efecto, la demanda de China no ha venido al rescate y Rusia, a pesar de las sanciones, sigue exportando petróleo en grandes cantidades.
El temor a que China entre en un período de poco crecimiento que reduzca la demanda de petróleo está presente. El presidente Xi Jinping, obsesionado con defenderse de lo que considera “amenazas extranjeras”, aprobó una ley contra el espionaje y abrió investigaciones a consultoras y empresas foráneas sembrando la percepción de que ahora es más riesgoso hacer negocios en China.
Un reporte de Goldman Sachs proyecta que este año la inversión extranjera que recibirá China será menor a los fondos que saldrán del país, al mismo tiempo que se debilita el mercado inmobiliario y el consumo se mantiene en cifras modestas.
En este entorno el Oxford Institute for Energy Studies espera un aumento del precio del petróleo en el segundo semestre pero a un nivel muy inferior a los del año pasado. El instituto proyecta que este año el precio del Brent promediará 85 dólares el barril y Ed Morse, jefe de análisis de materias primas de Citi, proyecta 82 dólares.
Un elemento clave es que Venezuela, por las sanciones y la calidad de sus crudos, coloca en el mercado sus barriles con un enorme descuento respecto al Brent. Para que el petróleo impulse el crecimiento de la economía de forma importante se requiere un alza relevante en la producción o el precio del barril.